Congreso de la CDMX da “estocada final” a corridas de toros
El Congreso de la Ciudad de México aprobó con 61 votos a favor y uno en contra la reforma que permite la realización de corridas de toros sin violencia. La iniciativa, respaldada por la jefa de Gobierno, Clara Brugada, prohíbe dar muerte a los toros dentro y fuera de la plaza.
El dictamen aprobado modifica la Ley para la Celebración de Espectáculos Públicos y la Ley de Protección y Bienestar Animal de la ciudad. Además, impone multas de entre 226 mil y 339 mil pesos por cada animal que resulte herido o muerto en estos eventos, con el objetivo de garantizar su integridad.
Una de las modificaciones aprobadas en el dictamen establece que cada corrida tendrá una duración máxima de 15 minutos, ampliando la propuesta original de 10 minutos. Asimismo, se estableció que, una vez finalizado el evento, el toro o novillo deberá ser devuelto a su ganadería o propietario.
El gobierno local contará con un plazo de 210 días naturales para expedir un nuevo reglamento que establezca los lineamientos específicos para la organización de los espectáculos taurinos, garantizando el cumplimiento de la nueva normatividad aprobada por el Congreso capitalino.
Durante la sesión legislativa, los diputados coincidieron en que la aprobación de esta reforma marca un día histórico para la Ciudad de México. Jesús Sesma, coordinador del PVEM, expresó que esta decisión representa el inicio del fin de la tauromaquia en la capital y un avance en la protección animal.
Daniel Álvarez, presidenta de la Comisión de Puntos Constitucionales, resaltó que el dictamen fue aprobado por consenso, con el respaldo de más de 27 mil firmas ciudadanas. Afirmó que la fiesta brava no desaparecerá, pero deberá adaptarse a los nuevos tiempos y respetar los derechos de los animales.
El legislador panista Federico Chávez calificó la reforma como un avance, aunque la consideró insuficiente, señalando que la restricción de corridas sin sangre no resuelve el problema de fondo sobre el maltrato animal. Pese a ello, votó a favor, destacando que es un paso en la dirección correcta.
Mientras la fracción del PVEM celebraba con camisetas alusivas al fin del maltrato animal, el morenista Pedro Haces fue el único legislador en votar en contra. Cuestionó la postura del PVEM y argumentó que la propuesta carece de un plan integral que garantice la viabilidad del sector taurino.
A las afueras del recinto legislativo, manifestantes a favor y en contra de la tauromaquia se reunieron desde temprano para seguir el debate. En algunos momentos, los ánimos se encendieron y hubo enfrentamientos verbales entre defensores de la fiesta brava y activistas en pro de los derechos de los animales.