Renace la esperanza con misa de Pascua en Santiago Apóstol
Con un templo completamente lleno, la comunidad católica vivió con emoción la misa de Pascua este domingo 20 de abril. Desde temprano, familias enteras, jóvenes y adultos mayores llegaron a la parroquia Santiago Apóstol, decididos a celebrar la resurrección de Cristo con fe y profundo fervor.
A las once en punto, el sacerdote Néstor Martínez dio inicio a la solemne eucaristía del Domingo de Resurrección. Su mensaje, lleno de esperanza, recordó que esta fecha representa la victoria de Jesús sobre la muerte y el pecado. “Cristo ha resucitado, y con Él, renace nuestra esperanza”, dijo ante los fieles.
Durante la homilía, el padre Néstor habló de la resurrección como una invitación personal a dejar entrar a Jesús en nuestra vida. “Él quiere ser luz en todos los rincones oscuros que necesitan de Él”, expresó con cercanía, alentando a los presentes a abrir su corazón para permitir que esa luz transforme su día a día.
La lectura del Evangelio según San Juan relató el momento en que María Magdalena descubre que la piedra del sepulcro fue removida. Corrió a avisar a Pedro y al otro discípulo: el cuerpo de Jesús ya no estaba. Fue el inicio del testimonio de fe que aún hoy conmueve al mundo.
La celebración fue profundamente emotiva. Algunos fieles se quedaron de pie durante toda la misa, porque no había espacio suficiente en las bancas. Otros rezaban en voz baja o con lágrimas contenidas. El ambiente era de paz, pero también de júbilo. La fe se sentía viva y compartida entre todos.
Al concluir la misa, se escuchó un fuerte “¡Aleluya!” que resonó entre los muros del templo. Muchos salieron con sonrisas, abrazándose entre ellos. “Cristo vive”, repetían algunos. Más allá del rito, lo vivido este domingo fue un verdadero encuentro comunitario con el amor, la esperanza y la vida.
