AHMSA va pa´largo
Permítanme compartirles mi asombro. Justo cuando pensábamos que la crisis ya no podía ser más pintoresca en esta región, nuestros empresarios y acreedores se han superado a sí mismos, demostrando una creatividad admirable para exprimir hasta la última gota de dignidad y dinero. Si esperaban buenas noticias, están en la ciudad equivocada.
Yo, francamente, ya no sé qué es más deprimente: si el noble arte de la dilación que practica Madisa contra AHMSA o el nuevo y brillante modelo de “esclavitud encubierta” en SESA.
En el frente de Altos Hornos de México, la tan prometida “luz al final del túnel” que esperaban miles de obreros ha sido eclipsada por la codicia. Resulta que el acreedor Madisa, según el líder local Ismael Leija, ha decidido que la ley que dicta que “los que llevan la preferencia… son los trabajadores” es una sugerencia, no una regla.
Ahora, Madisa está “jugando sucio” e interponiendo recursos legales con el objetivo “muy claro”: conseguir “dinero”. Al parecer, el bienestar de la base trabajadora es secundario. Su táctica, la cual aplaudo por su cinismo, es la “dilación”. ¿Para qué resolver rápido si puedes desesperar a la gente y, de paso, ahuyentar a los inversionistas que “se ponen a temblar” ante la inseguridad legal? Lo que Madisa busca es tiempo, un recurso más valioso que el fierro y el carbón, sobre todo cuando tienes una subasta millonaria planeada para noviembre. Y por si fuera poco, el Sindicato Minero también anda por ahí “metiendo ruido” aunque es ruido en favor de sus agremiados mineros de Hércules. ¡Qué gusto ver a los actores del rescate tan coordinados!
Pero esperen, que la verdadera innovación laboral la encontramos en la empresa de transporte SESA. Aquí, el modelo es tan exitoso que los propios choferes lo resumen como “pura como esclavitud”.
Fíjense bien en esta hazaña gerencial: 48 conductores están viviendo jornadas de casi 24 horas, con apenas dos horas para descansar, y todo por un salario base de ¡$298 pesos diarios!. Es un sueldo de ensueño para una jornada maratónica. La empresa ha sido tan astuta que implementó recortes salariales encubiertos al consolidar las “vueltas” para pagar menos, forzando al trabajador a manejar hasta la madrugada para poder llevar algo decente a casa. Si no contestan el teléfono, es falta. Si no asisten, pierden el premio de puntualidad. Y mi parte favorita: están obligados a trabajar sus días de descanso.
Todo esto, según los mismos choferes, ocurre porque SESA se está aprovechando de la crisis de su cliente Maxion. El ingenio capitalista en su máxima expresión: si el cliente falla, castigas a tu propio empleado. ¡Bravo!
Finalmente, ¿cómo financia el ciudadano común este glorioso paisaje de explotación y retrasos legales? Pues, claro, ¡con su recibo del agua!
El Sistema Intermunicipal de Aguas y Saneamiento (SIMAS) Monclova-Frontera nos ha dado una lección de magia financiera esta semana. Apenas nos presumían con bombo y platillo un superávit de 300 mil pesos, y ahora, ¡oh, sorpresa!, mi recibo viene inflado por el concepto más transparente que existe: “Otros Conceptos”. Estos misteriosos cargos, que superan los 462 pesos, han desatado la legítima duda: ¿Acaso ese superávit es el mismo dinero que nos están cobrando de vuelta sin justificación?.
Lo más bello es que, si usted se atreve a cuestionar la opacidad de los “Otros Conceptos”, SIMAS, liderada por el gerente Eduardo Campos, le cortará el servicio de agua potable con “estricta celeridad”, mientras él se mantiene en silencio.
En conclusión, mientras los inversionistas están “temblando”, los obreros de SESA están despiertos las 24 horas, y a nosotros nos roban con “Otros Conceptos”. Monclova avanza, señoras y señores. Y yo, me voy a buscar una audiencia pública, aunque sé que solo conseguiré una factura más alta.