En las pulgas oferta al alza, demanda en caída libre
La llegada de cientos de nuevos comerciantes, sobre todo ex obreros de AHMSA reduce las ventas y sobre todo las ganancias
Por: Roberto Ortiz
Por la situación que atraviesa AHMSA, las ventas en Monclova han caído drásticamente. Sin embargo, comerciantes ambulantes como Mary Carranza no se rinden. “Aquí andamos, no igual que antes, pero sí seguimos. Echándole ganas”, afirmó la coordinadora de la Unión de Comerciantes Ambulantes (UCA), mientras acomoda su mercancía.
Mary compartió que ha visto cómo incluso exempleados de la siderúrgica han recurrido al comercio informal para subsistir. “Hay gente de AHMSA que ha venido a vender. Yo les he dado espacios, les doy chance. Venden ropa, televisiones, cosas baratas. La situación está difícil y hay que apoyarnos entre todos”, dijo con determinación.
El impacto económico ha sido claro: antes vendía entre mil y mil 500 pesos diarios; ahora, a veces apenas logra 300. “Yo tenía un negocio en el centro, estuve allí 17 años, frente a Comisión Federal. Lo tuve que cerrar porque ya no sacaba ni para la renta”, relató con nostalgia.
Además del desplome en ventas, Mary señala que la competencia se ha intensificado. “Hay mucha gente vendiendo lo mismo. Me tocó reacomodar a tres personas porque todos traían el mismo plástico. Uno lo puse adelante, otro atrás… para que todos vendan aunque sea poquito”, explicó sobre su labor organizando espacios.
La crisis ha traído también a vendedores deportados de Estados Unidos. “Vienen con sus cosas, buscan dónde vender. Monclova está dura, no hay tantas oportunidades como antes, cuando todos tenían su trabajo fijo en AHMSA”, comentó Mary. Aun así, insiste: “No nos rajamos, seguimos en la lucha, como se pueda”.
