Funeraria Latinoamericana sigue acumulando quejas; salud sin actuar

• Ya son repetidas las ocasiones que entregan cuerpos sin embalsamar, tal fue el caso sufrido por la familia de Juanita Camarillo

Monclova. El dolor por la pérdida de Juanita Camarillo Flores se convirtió en indignación para su familia, luego de que denunciaron el mal servicio recibido por parte de la Funeraria Latinoamericana en Monclova. Acusaron negligencia en la entrega del cuerpo y pésima preparación, lo que les impidió despedirla dignamente.

Guadalupe García Camarillo, hija de la fallecida, relató que la funeraria no cumplió con los servicios contratados, retrasando la entrega del cuerpo para su velación. Además, descubrieron que el cuerpo presentaba llagas en la espalda y escurría líquidos, lo que generó confusión y profundo desconsuelo entre los familiares.

Ante el reclamo, una secretaria de la funeraria justificó la condición del cuerpo atribuyéndolo a los químicos utilizados en el proceso. Sin embargo, la familia no quedó satisfecha con la respuesta. Más tarde, el supervisor acudió a ofrecer una solución y firmó una responsiva a mano, comprometiéndose a evitar futuros incidentes.

La encargada de la funeraria solo ofreció una disculpa y aseguró que lo único que podían hacer era adelantar la sepultura. La familia exigió hablar con el gerente, pero les informaron que había salido de su turno y no podía atenderlos. La impotencia y el enojo se apoderaron de los deudos.

No es la primera vez que Funeraria Latinoamericana, ubicada en el bulevar Madero, enfrenta quejas por malas prácticas. De acuerdo con testigos, ha habido casos previos donde los cuerpos han sido entregados con deficiente preparación, generando un dolor adicional a las familias que acuden a sus servicios.

Carlos, hermano de la fallecida, explicó que apenas llevaban seis horas de velación cuando notaron el estado del cuerpo. Esto los obligó a buscar de inmediato a los encargados del panteón para adelantar la sepultura, lo que significó un costo extra, pues los trabajadores debieron laborar fuera de horario.

La familia lamentó no haber podido realizar la despedida planeada para Juanita. “Teníamos programada la misa para mañana, pero no va a tener su misa porque la tenemos que enterrar ya”, expresó Carlos con tristeza. Para ellos, la funeraria les arrebató la posibilidad de darle el último adiós como merecía.

La familia García Camarillo hizo pública su denuncia con la intención de alertar a la comunidad sobre el mal servicio recibido. Pidieron a las autoridades competentes revisar la calidad y el cumplimiento de los servicios funerarios en la ciudad para evitar que más familias pasen por una experiencia similar.