“Porque mi papá…”: entre lágrimas y dolor despiden a Miguel Salas, alias “El Cuate”
Por: Roberto Ortiz
En un ambiente cargado de tristeza, familiares y amigos despidieron a Miguel Salas, conocido como “El Cuate”, en el cementerio de Estancias de Santa Anna. Entre llantos desolados y abrazos solidarios, su partida dejó una profunda herida en quienes compartieron su vida y su cariño.
Miguel fue reportado como desaparecido el 9 de diciembre de 2024. Tras más de un mes de angustia, su cuerpo fue localizado sin vida, cerrando una búsqueda que desgarró a su familia. Aunque su hallazgo puso fin a la incertidumbre, el dolor de su pérdida se manifestó en un funeral lleno de emociones.
Antes de su sepultura, el féretro recorrió las calles de su colonia en un homenaje simbólico. Vecinos y amigos se despidieron entre aplausos, lágrimas y oraciones. “Era un hombre noble, siempre dispuesto a ayudar”, recordó un amigo cercano, mientras el cortejo avanzaba en un ambiente de respeto y tristeza.
En el cementerio, las palabras de consuelo no lograban mitigar el dolor. Flores, abrazos y lágrimas acompañaron el descenso del ataúd, mientras los gritos desgarradores de sus hijas rompían el silencio. “Porque mi papá…”, repetían con voz quebrada, reflejando la profundidad de su pérdida y el amor que les dejó.
Miguel Salas, recordado por su alegría y generosidad, dejó una huella imborrable en su comunidad. Su despedida no solo marcó el fin de una búsqueda dolorosa, sino también el inicio de un duelo compartido por quienes lo amaron y lo llevarán siempre en su memoria.
