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“Sin denuncia no hay delito”: menor que disparó balines podría quedar libre

Luego de la detención de Jonathan, un menor de 16 años que disparó una pistola de balines contra una familia en la colonia Tierra y Libertad, la Fiscalía de Justicia advirtió que, de no presentarse una denuncia formal, el joven podría quedar en libertad en menos de 48 horas.

El delegado de la Fiscalía en la Región Centro, Miguel Ángel Medina, confirmó que hasta la tarde del miércoles, los afectados no habían acudido al Ministerio Público. “Sin denuncia no hay delito y tendríamos que soltarlo”, expresó, lamentando la falta de acción por parte de las víctimas del ataque.

Jonathan fue detenido tras el incidente y asegurada la camioneta Chevrolet desde la cual realizó los disparos. El joven, aparentemente en pleno uso de sus facultades, actuó sin provocación ni justificación aparente, lo que generó preocupación por su comportamiento y el contexto familiar que lo rodea.

“Es lamentable ver a un jovencito actuar así. No hay explicación, no hay razón, y claramente esto viene desde casa”, dijo Medina. Consideró que es urgente reflexionar sobre la falta de valores en algunos hogares, ya que no es común ver a un menor actuar como si fuese un criminal formado.

El ataque ocurrió el martes en la tarde, cuando Jonathan, sin motivo claro, amenazó a una familia y les disparó con una pistola de balines desde su vehículo. Aunque nadie resultó con heridas graves, la agresión dejó una fuerte impresión en los vecinos, quienes exigen justicia y mayor vigilancia en el sector.

La falta de una denuncia ha complicado la labor del Ministerio Público, pues legalmente no pueden formular cargos sin que los afectados formalicen la queja. “Nosotros queremos actuar, pero la ley es clara. Necesitamos la denuncia”, reiteró Medina, haciendo un llamado a los afectados para que acudan cuanto antes.

El delegado subrayó que este tipo de casos no solo deben alarmar por el hecho en sí, sino por lo que representan: jóvenes sin rumbo, familias ausentes, y comunidades que normalizan la violencia. “Hoy son balines, mañana puede ser otra cosa”, advirtió, preocupado por la progresiva pérdida de límites en algunos jóvenes.

El plazo legal para retener a Jonathan está por vencer. Si antes de eso no se formaliza una denuncia, deberá ser liberado. El caso ha provocado indignación entre ciudadanos que consideran que las autoridades deben tener herramientas para actuar aun sin denuncia, cuando se trata de agresiones evidentes.

“Lo que más duele es la impotencia”, expresó una vecina que presenció el ataque. “Ver a ese muchacho con un arma, riéndose como si fuera un juego. Y ahora dicen que si nadie denuncia, simplemente lo van a dejar ir. ¿Y entonces qué aprendió?”, cuestionó con tristeza y enojo.

Mientras tanto, la familia agredida permanece en silencio. Se desconoce si tienen miedo de represalias o si simplemente han decidido no involucrarse más. La Fiscalía espera que en las próximas horas acudan a presentar la denuncia. De lo contrario, Jonathan podría volver a las calles, sin consecuencias.

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