Ley “chatarra” se aplicará en tres etapas según Abraham Segundo
Pese a que la prohibición de venta de comida chatarra en las escuelas está vigente desde el pasado 29 de marzo, en la Región será de forma gradual como se estará aplicando
Por: Roberto Ortiz
Aunque la ley que prohíbe la venta de comida chatarra en los planteles educativos entró en vigor el pasado 29 de marzo, en la Región Centro su aplicación será gradual. Abraham Segundo González, jefe de servicios educativos, explicó que la medida se implementa en tres etapas para facilitar la transición.
La primera etapa consistió en notificar a todas las escuelas para que iniciaran el retiro de productos chatarra de las cooperativas escolares. Con esta acción, se busca eliminar progresivamente los alimentos no saludables del interior de los planteles y promover la venta de opciones más nutritivas para los estudiantes.
En la segunda fase, se establecerá un diálogo con los padres de familia, exhortándolos a enviar a sus hijos con refrigerios saludables. Las autoridades enfatizan la importancia de involucrar a las familias en este proceso para generar conciencia sobre la alimentación adecuada y sus beneficios en el desarrollo de los menores.
La tercera y última etapa se enfocará en el retiro de vendedores ambulantes que operan en el exterior de los planteles. La medida ha generado inquietud entre los comerciantes, quienes sostienen que la aplicación de la norma debe ser pareja y no centrarse solo en ellos.
Un vendedor que ha trabajado durante años fuera de varias escuelas expresó su preocupación, señalando que, mientras a ellos se les restringe, algunos maestros siguen introduciendo y vendiendo comida como pizza dentro de las instalaciones. Pidió que las autoridades comiencen por regular lo que ocurre dentro de los planteles antes de sancionar a los ambulantes.
Los comerciantes están dispuestos a acatar la ley, siempre y cuando se haga de manera justa y equitativa. Para muchos de ellos, la venta de alimentos representa su principal fuente de ingresos, por lo que piden que las restricciones también se apliquen a quienes comercializan comida dentro de las escuelas.
